// Superlopez
Jorge Vidal
// Retorno a los 80
Superlopez es y ha sido siempre mi personaje favorito de comic. Sin duda porque Jan es mi dibujante favorito de todos los tiempos.
La década de los 80 supuso una obra maestra tras otra y posiblemente la cantera mas creativa nunca vista en el mundo del comic hispano. Yo diría que también a un nivel internacional, a la altura de los guiones de Goscinny y al nivel de dibujo de la escuela francobelga.
Sin embargo la difusión de Superlopez puertas afuera ha sido siempre capada, quizá debido a los problemas de licencia con Superman o a la miopía y mediocridad del empresario ibérico. Puertas adentro fue relegado a ser un tornillo mas dentro de la producción en cadena de la editorial a cargo, que nunca ha sabido ver el potencial real de la obra.
A medida que pasaron los años 90 y entramos en los 2000 Superlopez perdió las señas de identidad que tanto me gustaban: la parodia, el estilo de dibujo redondeado de cuatro cabezas y la multitud de detalles que había en cada viñeta.
Nunca he podido entender que se le haya relegado en la historia del comic español a un segundo lugar detrás de Ibañez, siendo Jan infinitamente superior. Superior a nivel de dibujo, puesto que Jan creó verdaderamente un estilo propio mucho mas complejo e inteligente que el de Ibañez (que copiaba y adaptaba a Franquin) y con unos guiones extraordinariamente cargados de sentido que no se parecían a nada de lo que se hacía ni antes ni hoy en día, mientras que el resto de los autores repetian una y otra vez el mismo chiste.
Aunque Jan no quiere que nadie le imite el estilo yo no concibo Superlopez sin su diseño original, y he dibujado este fan art. Que me perdone el maestro.
Mi propia lista de favoritos y algunos de sus porqués.
Me resulta imposible decidirme en el orden porque todos son muy diferentes entre sí y creo que no se pueden clasificar :
“La Semana mas larga”, el mas representativo retrato del hastio del ciudadano medio. La vida del asalariado español, los problemas de identidad y la fantasía mezclada con la trama policíaca. El mundo del futbol fielmente retratado que sigue moviendo masas hoy en día. Infinitos detalles en cada viñeta. Inolvidables chistes de cacahuetes, que es la forma que tiene la nariz del Inspector Holmez.
“Cachabolik Blues Rock”, aunque no es un clásico me sigue pareciendo divertidísimo, original y totalmente intesperado. Marca un estilo de dibujo cada vez mas realista. Los secundarios se convierten en protagonistas, pero aún conserva la parodia. Interesante el discurso acerca del artista que hace algo comercial en lugar de lo que le gustaría, un mensaje transparente y desconcertante a la vez viniendo de un artista de la talla de Jan en un comic “para niños”.
“La Gran Superproducción”, el mejor retrato sobre el mundo del cine hasta la fecha. Trepismo, divismo y otras neuras fielmente reflejadas, incluido el “crunch time”. Es un “La Noche Americana” en versión comic.
“El Supergrupo”, superhéroes pidiendo crédito en un banco es algo insuperable. Junto a “Las Aventuras de Superlopez” la mejor parodia del género hasta la fecha. Brillante. Es difícil de saber qué es de Jan y qué es de Efepe.
“Los cabecicubos”, totalmente desconcertante. Paralelismo con la guerra civil o con todas las guerras. Interesante cómo se integran los secundarios en la historia principal.
“Los alienígenas”, inolvidables las páginas de noticias en este comic, reflejo del poder de la prensa escrita, mucho antes de la aparición de internet. El tema de la identidad y del doble trabajado a fondo. Parodia del ejército y el poder.
“El señor de los chupetes”, aventuras fantásticas sin desligarse de la crítica social con ironía. Un Superlopez muy paródico que oscila entre un debo salvar el mundo y un dejadme en paz. Esta característica se fue perdiendo con el tiempo y es una de las señas de identidad que dotaban al personaje de personalidad.
“Los petisos carambanales”, posiblemente el mas creativo de todos, aunque no el más divertido, y el mejor dibujado junto “Al Centro de la Tierra”. Hay algo de Peyo en estos petisos, posiblemente. Jan se tomó la molestia de hacer un alfabeto que algunos hasta se aprendieron de memoria.
“La caja de Pandora”, aunque no está en los que mas me gustan, es un imprescindible. Marca el inicio de un dibujo mas realista. Se supone que es el que inicia una etapa mas adulta, pero yo considero que ya “Los cabecicubos” o “El señor de los chupetes” tenían multiples lecturas. Se puede ligar a “Laszivia”, una rareza que dibujó Jan en su mejor etapa, con otro personaje y temática, pero conservando el sentido del humor y el grafismo que caracterizaba su mejor etapa.
Otros títulos también son interesantes, así como la evolución del dibujo de Jan a lo largo de las siguientes décadas, sin embargo para mi esta etapa de los años 80 es in-su-pe-ra-ble.
Gracias maestro.